Bajo el título “CONTEXTO SOCIAL ACTUAL Y NUEVA EVANGELIZACIÓN”, los días 18 y 19 de febrero de 2012, se han celebrado en Madrid las XXXII Jornadas Generales de Apostolado Seglar.
Las Jornadas han estado presididas por Mons. D. Carlos Osoro, Arzobispo de Valencia y Presidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar (CEAS) y por Mons. D. Ángel Rubio, Obispo de Segovia y miembro de esta comisión. Ha actuado como moderador Mons. D. Antonio Cartagena, Director del Secretariado de la CEAS.
Los participantes en las Jornadas han sido los Delegados de Apostolado Seglar y miembros de las delegaciones representantes de cuarenta diócesis.
Tras la oración de apertura, Monseñor Osoro inauguró el trabajo haciendo memoria de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) del pasado verano, recordando la invitación del Papa Benedicto XVI a promover el encuentro con Jesucristo y a vivir una profunda experiencia eclesial, claves fundamentales para el apostolado seglar hoy.
En sintonía con la Iglesia universal, el contenido central de las Jornadas ha girado en torno a la evangelización en esta nueva etapa de la historia; etapa que viene marcada por una cultura ambivalente. Con gran claridad, el Profesor Agustín Domingo Moratalla, ha presentado la inseparable relación entre cultura y cristianismo. Ha destacado la singular aportación del cristianismo a la vida social a lo largo de la historia y ha subrayado la necesidad de continuar innovando y fecundando la cultura actual para que los hombres de nuestro tiempo tengan vida y vida en abundancia. En este sentido, ha señalado como condición indispensable el encuentro personal con Jesucristo, pues la contribución de los cristianos a la cultura actual será el resultado de este Encuentro.
En su conferencia, el profesor Moratalla ha presentado algunos rasgos significativos de la cultura actual, señalando que los valores, costumbres y maneras de entender la vida hoy, no disponen a las personas para acoger la fe cristiana. En este sentido, ha resaltado la necesidad de contar con cristianos capaces de saber leer y descifrar los nuevos escenarios sociales, culturales, económicos, políticos y religiosos, que en estas últimas décadas han surgido, para habitarlos y transformarlos en lugares de testimonio y de anuncio del Evangelio.
Por tanto, evangelizar en el momento presente, reclama cristianos laicos con un estilo audaz, actores alegres, creativos y arriesgados, capaces de seducir con su testimonio y con la palabra a sus hermanos en el escenario de la vida de cada día.
“Laicos protagonistas de la nueva evangelización”. Este ha sido el contenido de la segunda conferencia desarrollada vivamente por el Profesor Xavier Morlans. La novedad de la etapa actual de la evangelización, según Morlans, conlleva la novedad de la autoevangelización, es decir, la conversión de los testigos, nuevas formas de testimonio: solidaridad y alteridad con el pobre, nuevos retos de diálogo, con la cultura y en la calle, nuevos métodos para alumbrar la primera fe o reavivar la fe adormecida, métodos de tiempo breve y concentrado para el primer anuncio de Jesucristo; métodos de tiempo largo y dicursivo: las catequesis kerigmáticas o precatequesis, itinerarios diocesanos de renovación cristiana. Y nuevos lenguajes: orales, escritos, audiovisuales, informáticos,…
En continuidad con el Concilio Vaticano II, el profesor Morlans, ha señalado algunos aspectos para que los laicos sean protagonistas de la nueva evangelización y algunas opciones pastorales: promover la acción del cristiano en sus ámbitos de presencia e influencia, el laico acogiendo y acompañando itinerarios de formación cristiana, hacia la constitución de Escuelas Diocesanas de evangelización en las que laicos, presbíteros, diáconos y religiosos trabajen juntos.
Además, en las Jornadas, se han compartido las nuevas experiencias pastorales que están naciendo en las diócesis. Experiencias y gestos de presencia y anuncio del amor de Dios por parte de la Iglesia, en los hospitales, en la política, con sindicatos, en el trabajo, en la calle, en diálogo con no creyentes, en zonas rurales, con jóvenes, con familias, en la parroquia, en la formación del laicado, etc. Una riqueza de iniciativas que ponen de manifiesto la pasión de la Iglesia por la evangelización.
Las dos conferencias junto con estas acciones pastorales dispusieron a los participantes a la reflexión y trabajo en grupo, así como al posterior diálogo en el plenario. La urgencia de la evangelización reclama la comunión de todos los que hemos sido llamados por Dios a trabajar en su plan de salvación, esta es la gran inquietud y tarea de las delegaciones diocesanas de Apostolado Seglar.
D. Antonio Cartagena dio por finalizadas las Jornadas agradeciendo la participación de todos, el buen ambiente y la riqueza de la reflexión. Animó a seguir trabajando en este hermoso y necesario campo del apostolado laical.
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